Contenidodeinteracciónconelpaciente

    Tos Ferina En Los Niños

    Para descargar la versión traducida al ucraniano haga clic en el siguiente enlace

    Apr.21.2022
    Pertussis, Pediatric

    Tos ferina en los niños

    Pertussis, Pediatric

    La tos ferina, también conocida como tos convulsa, es una infección que causa ataques de tos súbitos e intensos. Puede tener complicaciones graves, especialmente en los bebés.

    Se transmite fácilmente de persona a persona (es contagiosa). Se transmite a los demás por las gotitas esparcidas en el aire cuando la persona infectada habla, tose o estornuda. Puede ser que el niño no tenga síntomas hasta 3 semanas después de haber estado expuesto a la bacteria que causa la tos ferina.

    ¿Cuáles son las causas?

    La causa de esta enfermedad es la bacteria Bordetella pertussis. Las bacterias se pueden transmitir al niño cuando:
    • Inhala las gotitas esparcidas en el aire por una persona infectada.
    • Toca una superficie donde cayeron las gotitas y luego se toca la boca o la nariz.

    ¿Qué incrementa el riesgo?

    Los siguientes factores pueden hacer que el niño sea más propenso a sufrir esta afección:
    • Estar en grupos de niños en la escuela o preescolar.
    • Estar en lugares públicos cerrados.
    • Si el niño se toca la boca, los ojos o la nariz sin antes lavarse ni desinfectarse las manos.

    ¿Cuáles son los signos o síntomas?

    Los síntomas de esta afección incluyen:
    • Síntomas similares a los de un resfrío. Estos aparecen al comienzo de la infección y duran 1 o 2 semanas. Los síntomas incluyen secreción nasal, fiebre baja, tos leve, diarrea y ojos rojos y llorosos.
    • Después de 10 a 14 días de evolución de la enfermedad, aparecen los ataques intensos y repentinos de tos. Estos ataques de tos pueden:
      • Ocurrir con frecuencia y durar hasta 2 minutos.
      • Desencadenarse al hacer alguna actividad en los niños mayores y al alimentarse en el caso de los bebés.
      • Provocar que los niños mayores de 6 meses respiren con dificultad y emitan sonidos sibilantes para obtener aire y, en los bebés más pequeños, que la respiración se detenga por un breve lapso.
      • Hacer que la piel y los labios del niño se tornen azules por la falta de oxígeno.
      • Provocar que el niño se desmaye por un breve lapso.
      • Causar arcadas o vómitos.
      • Dejar al niño con una sensación de agotamiento.

    ¿Cómo se diagnostica?

    Este trastorno puede diagnosticarse mediante:
    • Un examen físico.
    • Análisis de laboratorio de la mucosidad de la nariz y la garganta.
    • Un análisis de sangre.
    • Una radiografía de tórax.

    ¿Cómo se trata?

    Esta afección puede tratarse con antibióticos. Los antibióticos pueden:
    • Acortar la enfermedad y hacerla menos contagiosa, si el tratamiento se comienza de inmediato.
    • Ser recetados a todas las personas de la casa.

    Los niños, especialmente los bebés, con casos severos de tos ferina pueden necesitar la hospitalización. La tos leve puede continuar durante meses después de haber tratado la infección. Esto puede deberse a la inflamación y el dolor remanentes en los pulmones.

    Siga estas instrucciones en su casa:

    Medicamentos

    • Adminístrele los medicamentos de venta libre y los recetados al niño solamente como se lo haya indicado el pediatra.
    • Adminístrele al niño los antibióticos como se lo haya indicado el pediatra. No deje de darle al niño el antibiótico aunque empiece a sentirse mejor.
    • No le administre al niño medicamentos para la tos a menos que se lo haya indicado el pediatra.
    • No le dé aspirina al niño por el riesgo de que contraiga el síndrome de Reye.

    Si el niño tiene un ataque de tos:

    • Siéntelo en posición erguida.
    • Use un humidificador en su casa para aumentar la humedad del aire. Esto calmará la tos y ayudará a aflojar la mucosidad de los pulmones del niño (esputo). No utilice vapor.
    • Evite que el niño se exponga a sustancias que pueden irritar los pulmones, como humo, aerosoles y vapores. Estas pueden empeorar la tos del niño.

    Evite que la infección se propague

    • Mantenga al niño alejado de aquellos que están en riesgo de desarrollar la enfermedad durante los primeros 5 días de tratamiento con antibióticos.
    • No lo lleve a la escuela o a la guardería hasta que haya recibido tratamiento con antibióticos durante 5 días. Informe en la escuela o guardería que al niño le diagnosticaron tos ferina.
    • Si no le recetan antibióticos, mantenga al niño en la casa durante las primeras 3 semanas que dura la tos o como se lo haya indicado el médico.
    • El niño y todas las personas que viven en su casa deben lavarse las manos frecuentemente para evitar el contagio de la infección. Use desinfectante para manos si no dispone de agua y jabón.
    • Les recomendarán la aplicación de vacunas a los miembros de la familia en riesgo de contraer tos ferina. Los grupos de riesgo son:
      • Bebés.
      • Aquellos que no han completado su vacunación contra la tos ferina. Se debe consultar a sus pediatras.
      • Los que fueron vacunados pero que no recibieron la última vacuna de refuerzo. Se debe consultar a sus pediatras.

    Instrucciones generales

    • Haga que el niño descanse todo el tiempo que pueda. Haga que el niño reanude lentamente sus actividades normales como se lo haya indicado el pediatra.
    • Haga que el niño beba la suficiente cantidad de líquido como para mantener la orina de color amarillo pálido.
    • Si el niño tiene vómitos, ofrézcale comidas pequeñas y frecuentes en lugar de tres comidas abundantes.
    • Vigile la afección del niño atentamente para detectar cambios.
    • Concurra a todas las visitas de seguimiento. Esto es importante.

    ¿Cómo se evita?

    A nurse cleaning a child's upper arm before giving an injection.

    La tos ferina puede prevenirse con una vacuna y refuerzos posteriores. Pregúntele al pediatra acerca de la vacuna contra la tos ferina.

    Comuníquese con un médico si:

    • El niño no puede parar de vomitar.
    • El niño no puede comer o beber.
    • El niño tiene tos que no mejora.
    • El niño tiene fiebre.
    • El niño está inquieto y no puede dormir.

    Solicite ayuda de inmediato si:

    • El niño tiene un episodio de tos y los labios o la piel se le ponen de color rojo o azul.
    • El niño queda inconsciente después de un episodio de tos, aun si es solo por algunos momentos.
    • Tiene problemas respiratorios o períodos en los que la respiración se hace más lenta, se acelera o se detiene.
    • El bebé está perezoso o duerme demasiado.
    • El niño es menor de 3 meses y tiene fiebre de 100.4 °F (38 °C) o más.
    • Tiene un niño de 3 meses a 3 años de edad que presenta fiebre de 102.2 °F (39 °C) o más.
    • El niño es menor de un año y usted nota signos de deshidratación. Estos pueden incluir:
      • Una parte blanda de la cabeza del bebé (fontanela) hundida.
      • Pañales secos después de 6 horas de haberlos cambiado.
      • Mayor irritabilidad.
      • Ausencia de lágrimas cuando llora
    • El niño es mayor de un año y usted nota signos de deshidratación. Estos incluyen:
      • Ausencia de orina en un lapso de 8 a 12 horas.
      • Labios agrietados o boca seca.
      • Ausencia de lágrimas cuando llora.
      • Ojos hundidos.
      • Somnolencia o debilidad.

    Estos síntomas pueden representar un problema grave que constituye una emergencia. No espere a ver si los síntomas desaparecen. Solicite atención médica de inmediato. Comuníquese con el servicio de emergencias de su localidad (911 en los Estados Unidos).

    Resumen

    • La tos ferina, también conocida como tos convulsa, es una infección que causa ataques de tos súbitos e intensos.
    • Los síntomas incluyen síntomas parecidos a los de un resfrío y tos intensa.
    • Administre los medicamentos, incluidos los antibióticos, como se lo haya indicado el pediatra.
    • Comuníquese con el pediatra si el niño está deshidratado. Solicite ayuda de inmediato si el niño tiene problemas para respirar o períodos en los que la respiración se hace más lenta, se acelera o se detiene.

    Esta información no tiene como fin reemplazar el consejo del médico. Asegúrese de hacerle al médico cualquier pregunta que tenga.

    Small Elsevier Logo

    Cookies são usados neste site. Para recusar ou saber mais, visite nosso página de cookies.


    Copyright © 2024 Elsevier, its licensors, and contributors. All rights are reserved, including those for text and data mining, AI training, and similar technologies.

    Small Elsevier Logo
    RELX Group